lunes, 4 de octubre de 2010

Regresos...

Siempre es complicado retomar hábitos del pasado, sobre todo cuando se tienen olvidadas. Sin embargo, me he propuesto, o mejor dicho, exigido, seguir adelante con este buen hábito que me encanta pero con el que no soy constante aunque me lo exija: escribir sobre música.

Hace algunas semanas, se realizaron los VMA's y tuve un gran entusiasmo por verlos. Entre tanto Gaga, Jersey Shore y Chelsea Handler, descubrí lo musicalmente indescriptible, en todos los sentidos: Florence and the Machine. Véanlo con sus propios ojos, en Dog days are over...



Y, luego, Cosmic Love...



Florence Welch es inglesa y lidera Florence and the Machine, a band of her own, una epifanía que tuve gracias al canal que, antes, era estríctamente sobre música: MTV. Lo que pareció poco comprensible se solucionó buscando las letras de las canciones, ya que, ese acento aunque también los tengan ciertos antepasados míos y lo lleve en algunos glóbulos de mi sangre, dificultaba el entendimiento entre la londinense y yo.

Algunas veces no la entiendo, pero cuando la escucho solo pienso que la música no debe de entenderse, debe sentirse y disfrutar y, sin duda, Florence and the Machine involucra esos dos sentimientos.
Porque nuestra vida tiene un soundtrack, cada minuto, segundo e instante está acompañado de una canción.